Foto: cortesía Democracy Now!
El número de muertes por el huracán Helene asciende a 190.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó al Pentágono el despliegue de 1.000 soldados en servicio activo para ayudar con las tareas de socorro por las inundaciones.
El número de muertes derivadas del huracán Helene ha alcanzado las 190. Asimismo, cientos de personas continúan desaparecidas y se teme que están muertas. Los cortes en el suministro eléctrico y la escasez de agua continúan causando estragos en seis estados del sureste del país.
El miércoles, la vicepresidenta Kamala Harris inspeccionó los daños causados por la tormenta en la ciudad de Augusta, estado de Georgia, donde los residentes llevan casi una semana luchando por conseguir alimentos, agua y electricidad. Harris recorrió un centro de ayuda de la Cruz Roja y habló con la prensa frente a una casa en cuyo techo había caído un árbol.
Vicepresidenta Kamala Harris: “Estoy aquí para observar personalmente los daños devastadores, que son enormes. Es particularmente devastador la pérdida de vidas que ha sufrido esta comunidad, así como la pérdida de la normalidad y de recursos vitales”.
El secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, dijo el miércoles que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias no tiene fondos para solventar el resto de la temporada de huracanes. El presidente Biden ha señalado que es posible que convoque al Congreso, actualmente en su receso de octubre, para abordar el asunto.
Mientras tanto, dos estudios de atribución rápida concluyeron que el aumento de la temperatura global es la responsable de la severidad del huracán Helene, impulsando la velocidad máxima de los vientos y aumentando hasta en un 50% la cantidad de precipitaciones ocurridas en Georgia y los estados de Carolina del Norte y del Sur.