Manuel López Obrador, candidato de centro-izquierda que compitió por las presidenciales de México dijo este lunes que impugnará las elecciones presidenciales del domingo —en las que se impuso Enrique Peña Nieto del PRI—porque fueron «sucias, inequitativas y plagadas de irregularidades».
«Nuestra convicción es respetar la voluntad popular… la elección presidencial federal a todas luces fue inequitativa y plagada de irregularidades», señaló López Obrador en una conferencia de prensa.
El político del Partido de la Revolución Democrática (PRD) aseguró que agotará todos los «procedimientos legales» que tenga a su favor para demostrar que hubo fraude en los comicios.
«Ganamos con amplio margen, no podemos aceptar un resultado fraudulento», expresó López Obrador, quien junto con los otros tres aspirantes presidenciales que compitieron en la contienda había firmado la semana anterior un documento con el Instituto Federal Electoral (IFE) en el que se comprometía a aceptar los resultados.
López Obrador, quien en 2006 fue derrotado por una mínima diferencia ante Felipe Calderón, dijo que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) de Peña Nieto compró «miles de millones de votos» en todo el país.
«El candidato del PRI usó dinero a raudales, miles de millones de pesos de procedencia ilícita y rebasó por mucho lo permitido por la ley, fue patrocinado por la mayoría de los medios de comunicación. Compraron 2 millones 900 mil votos por lo menos en el Estado de México y esto se dio en otros estados», señaló.
De igual forma, señaló que esperará a que culmine el conteo del IFE y convocó a sus seguidores a denunciar «las anomalías» que se presentaron durante el proceso electoral.
«Los convoco que participen a dar cuenta de anomalías antes, durante y después de la jornada electoral… Es imprescindible que no quede ninguna duda acerca de los resultados por el bien de México y de nuestro pueblo», expresó.
«Vamos, como lo expresé, a dar seguimiento a todo el proceso establecido por ley, que el miércoles se van a llevar a cabo los cómputos distritales, vamos a participar, a pedir transparencia».
El político, quien en 2006 denunció fraude y lideró un bloqueo para rechazar los resultados electorales en una de las principales avenidas de Ciudad de México, también se dijo «tranquilo» y afirmó que va a ir «poco a poco resolviendo lo que convenga».
«Sé cuál es mi responsabilidad histórica y voy a actuar en consecuencia», manifestó.
Escrutado un 96.72 por ciento del sistema de resultados preliminares del IFE Peña Nieto obtuvo la presidencia de México con más del 38,8 por ciento de respaldo, un porcentaje que sus contradictores consideran menor y que no «expresa la voluntad del pueblo mexicano», según comentaron en la marcha.
El político de 45 años, quien está casado con la actriz de telenovelas Angélica Rivera, dejó en segundo lugar a López Obrador, que obtuvo un 31,68 de votos.
La oficialista Josefina Vázquez Mota, del Partido Acción Nacional (PAN), quedó en un tercer lugar con un 25,43 por ciento y en cuarto el ambientalista Gabriel Quadri, de Nueva Alianza, un partido que apoya un poderoso sindicato de maestros, que obtuvo un 2,3 por ciento de los votos.