
Por Héctor Riazuelo, JM Pinochet
Lo mereció Bélgica por la persistencia. Lo mereció Estados Unidos por el orgullo. Al final fueron los diablos rojos los que supieron dar dos rápidas estocadas en el tiempo suplementario y así lograr su cupo a los cuartos de final.
Es la primera vez que los ocho ganadores de grupo logran acceder a esa fase, otro de los récords de un Mundial que está quedando en la retina de todos.
Como lo vivido esta noche en el estadio Fonte Nova en Salvador, sede que ha disfrutado de un Mundial de goles y reacciones.
Bélgica disparó hasta en 39 ocasiones al arco de Tim Howard, pero sólo dos de ellas entraron. Fue un juego espectacular el del portero estadounidense, pero no pudo evitar la derrota.
Cuando Bélgica celebraba la clasificación llegó la reacción del equipo de Klinsmann, que lo puso contra las cuerdas. Pero el gol de Green no fue suficiente para salvar el sueño de todo un país.
Bélgica jugará contra Argentina por un cupo en la semifinal, fase a la que no llega desde 1986. ¿Se acuerdan de lo que pasó? Ese año perdió por dos goles del 10 de Argentina, Diego Armando Maradona.
¡Qué final! ¡Qué partido! Lo tuvo Bélgica con dos rápidos goles en tiempo suplementario, pero reaccionó el conjunto de Klinsmann para encerrar a los diablos rojos y tener el empate en sus botas.
No pudo Estados Unidos que se despide de un sueño mundialista que tuvo contagiado a gran parte del país.
Fuente: BBC Mundo