Por Francisco Ramírez
Un dia 10 de octubre hace 27 años miles de refugiados en Mesa Grande, Honduras decidieron regresar a sus lugares de origen en la hacienda Copapayo, en Cuscatlán; Las Vueltas y Guarjila en Chalatenango; y Santa Marta en Cabañas. Una larga y dura historia para contarla en pocas lineas, solo sé que por lo difícil que eso fue vivirlo
Antes de emprender ese camino de regreso a casa —como hoy se le llama— ya habían pasado exactamente 10 años de historia de la comunidad Santa Marta, para los y las que ya teníamos uso de razón, en esa fecha sabemos bien esas fechas y a que me refiero; pues apenas con pocos años de edad recuerdo muy bien los antecedentes desde 1979 de la lucha combativa de varios de la comunidad y sus alrededores.
Vale la pena hoy en dia celebrar esta fecha 10 de octubre, pero no tiene sentido si solo lo hacemos sin el reconocimiento a todos y tadas aquellas que en el camino desaparecieron fisicamente. Hoy los que aún vivimos y las nuevas generaciones, tenemos un compromiso de honrar a esas personas. Vamos todos y todas a continuar con la unidad, solidaridad y lucha, el camino continua.