Antonin Scalia, de 79 años, el miembro más destacado del ala conservadora de la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos, murió de causas naturales entre la noche del viernes y la madrugada de este sábado en un rancho de Texas.
Su muerte abre una batalla política, ya que el presidente Barack Obama (demócrata) dijo que nombrará a un sucesor mientras que los republicanos quieren que lo elija quien gane la presidencia en las elecciones del próximo noviembre.
La mayoría conservadora de la Corte Suprema frenó recientemente los esfuerzos del presidente Barack Obama en materia de cambio climático e inmigración.
Sin embargo, el nombramiento de su sustituto podría cambiar el equilibrio de poder. Ahora había cuatro jueces conservadores, cuatro progresistas y uno, Anthony Kennedy, que siempre rompe el impasse, ya que a veces vota con un bando y después con el otro.
El presidente Barack Obama tiene ahora la oportunidad de nominar a un quinto juez de corte liberal, algo que se le tornará muy difícil, según entendidos en la materia.
Scalia fue elegido a la Corte Suprema en 1986, tras ser nombrado por el presidente republicano Ronald Reagan, lo cual indica que integró la máxima instancia de Justicia de este país durante tres décadas.
Trascendió que el fallecido juez llegó el viernes al resort de lujo Cibolo Creek Ranch, en la región de Big Bend, al sur del pueblo de Marfa, en el oeste de Texas.
Scalia asistía a una fiesta con unas 40 personas. Al no aparecer a la hora del desayuno, alguien fue a su habitación y lo encontró muerto.
