En una decisión sin precedentes, Facebook expulsó de su plataforma de redes sociales al comandante en jefe del Ejército de Birmania, un día después de que la Organización de las Naciones Unidas emitió un informe en el que solicitaba que se investigara a los principales generales militares de ese país por denuncias de genocidio contra la población rohinyá, que profesa la religión musulmana.
La violencia liderada por el Estado en Birmania el año pasado condujo al desplazamiento de 700.000 musulmanes rohinyás. Naciones Unidas también criticó a Facebook por ser un “instrumento útil para aquellos que buscan propagar el odio”.