En el estado de California, un juez federal ordenó que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas revise con urgencia los casos de detenidos que presentan mayor probabilidad de sufrir una enfermedad grave o la muerte a causa del coronavirus, a fin de determinar si pueden ser liberados.
El juez Jesús Bernal condenó la “inacción de todo el sistema” en la respuesta al brote. La orden alude a detenidos mayores de 55 años, inmigrantes embarazadas y a quienes padecen enfermedades crónicas. Aproximadamente 31.000 inmigrantes se encuentran recluidos en prisiones para inmigrantes, y está confirmado que al menos 220 de ellos tienen COVID-19.
Corte Suprema considerará el papel que desempeñan los receptores de DACA
La Corte Suprema de Estados Unidos sostuvo que considerará el papel que los trabajadores indocumentados están desempeñando para ayudar a combatir el brote de coronavirus, antes de tratar un destacado caso que desafía la decisión de Donald Trump de poner fin al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, conocido como DACA por sus siglas en inglés, que otorga protección temporal al menos a 700.000 personas personas indocumentadas que llegaron a Estados Unidos siendo niños.
Alrededor de 27.000 beneficiarios del programa son trabajadores de la salud. Grupos jurídicos involucrados en el caso afirman que poner fin a dicho programa durante la crisis de salud pública sería “catastrófico”.
