Por Ramón Jiménez
Virginia es el único Estado de la región metropolitana de Washington donde se les niega el derecho de tener licencia de conducir a personas indocumentadas, a pesar de que en Maryland y el Distrito de Columbia —los otros estados vecinos— así como otros dieciocho estados de la Unión Americana ya lo hacen, no solamente para seguridad de todos los ciudadanos sino también por aspectos económicos.
También es uno de los estados donde los estudiantes que por cualquier motivo carecen de documentos legales —excepto aquellos amparados por la ley DACA— tienen que pagar colegiaturas tres veces más altas que sus contrapartes nacidos en este país o que ya son residentes legales.
Danna Chávez-Calvi, una beneficiaria del programa DACA, quien llegó al área de Washington desde la edad de 8 años, trabaja ayudando a otros jóvenes para que se envuelvan más en los quehaceres de la comunidad.
«Desde que fui aceptada al programa DACA y continué con mis estudios como cualquier otro estudiante de Virginia, mi vida ha cambiado totalmente», aseguró Chávez-Calvi, quien ahora trabaja en las Escuelas Públicas de la ciudad de Manassas, condado de Prince William.
Pero los panelistas de la Coalición de Organizaciones Latinas de Virginia (VACOLAO) que participaron en la conferencia, consideran que nos es suficiente que solo los estudiantes que se amparan al programa DACA sean beneficiados, mientras que miles de jóvenes que carecen de documentos tienen que pagar muchos más de colegiatura o no pueden continuar, porque no alcanzan a pagar colegiaturas tres veces más de lo que pagan los estudiantes con documentos migratorios.
Así como les preocupa el caso de los estudiantes, a los miembros de VACOLAO también les preocupa los miles de personas en todo el Estado, quienes carecen de una licencia para poder conducir legalmente a sus centros de trabajo, llevar sus hijos a las escuelas o realizar sus actividades diarias; porque muchos conducen violando las leyes de tránsito y exponiéndose a ser arrestados por las autoridades.
Ante esa situación algunos miembros de la Asamblea General y del Senado estatal de Virginia, como la senadora Jennifer Boysko y la delegada Kathy Tran, han presentado los proyectos de ley SB 643 y HB 1211, respectivamente, que eliminarán los requisitos de inmigración de la licencia de conducir común de Virginia.
Así lo confirmaron representantes de organizaciones comunitarias que constantemente luchan por los derechos de los inmigrantes, no solo de Virginia sino de todo el área metropolitana de la capital estadounidense, durante una rueda de prensa que tuvo lugar este lunes en la ciudad de Falls Church, en el norte de Virginia.
“La propuesta es abrir la licencia que no cumpla con el Real ID para cualquier persona con cualquier estatus legal”, dijo Simón Sandoval-Moshenberg, director legal del Centro de Justicia de Ayuda Legal.

“Queremos que la comunidad indocumentada se sienta segura y que solicitar la licencia de manejo no sea un control de la privacidad de la persona que la solicita”, apuntó.
Al activista Jonathan Cano le sorprende que de unos años para acá Virginia ya no emita licencia de conducir como lo hacía antes con las personas indocumentadas.
“Este no es un tema de inmigración sino un tema de igualdad racial; una necesidad para todos, ya que habrá más seguridad en las carreteras, un mayor número de vehículos asegurados para protección de quienes manejan y ayudará de gran manera a las comunidades de Virginia”, destacó Cano.
Los miembros de la Coalición de Organizaciones Latinas de Virginia (VACOLAO) buscan que los latinos de la región de Washington participen de una forma más activa en las actividades que esa organización realiza constantemente, como la que realizarán este jueves 16 de enero a las 8am. en la ciudad de Richmond, sede la Asamblea General y del Senado estatal.
Ese día a las 6 de la mañana saldrá un bus de las oficinas del Centro de Justicia de Ayuda Legal, ubicado en el 6066 de Leesburg Pike, Suite 520, en Falls Church (en las cercanías de la Iglesia San Antonio) en el sector de Culmore, para visitar algunos congresistas y senadores estatales. Las personas interesadas en participar pueden llegar a ese sitio. Será un viaje de casi todo el día.