En el estado de California, un inmigrante de 74 años murió por suicidio el domingo en el centro de detención Mesa Verde, situado en la ciudad de Bakersfield.
Choung Won Ahn había estado encarcelado en la prisión del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas desde febrero, y durante meses había estado pidiendo ser puesto en libertad, ya que sufría de diabetes, hipertensión y varias afecciones cardíacas que lo hacían vulnerable a la COVID-19.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas negó repetidamente sus solicitudes, al tiempo que Ahn temía contraer el virus dentro de las precarias y abarrotadas instalaciones. Mesa Verde es propiedad de la compañía privada de prisiones GEO Group.