El miércoles, en una decisión que podría transformar a la Corte Suprema estadounidense por décadas, el magistrado Anthony Kennedy anunció su retiro.
Esto brinda al presidente Donald Trump la oportunidad de elegir a un segundo juez conservador en el tribunal superior.
Aunque Kennedy fue designado por el expresidente Ronald Reagan, era ampliamente considerado como el voto decisivo en la Corte Suprema, integrada por nueve jueces. Su retiro le da al presidente Trump la oportunidad de consolidar una mayoría conservadora por toda una generación.
Las siguientes son las declaraciones que hizo Trump al respecto en un acto político de campaña, el miércoles por la noche en la ciudad de Fargo, en el estado de Dakota del Norte.
El presidente Tump declaró: “Tenemos que elegir un [juez] fabuloso. Tenemos que elegir uno que permanezca allí durante 40 o 45 años. Necesitamos intelecto. Hay muchas cosas por hacer. Ustedes saben que hay muchos elementos que contribuyen para ser un gran magistrado de la Corte Suprema, y hay que considerar cada aspecto”.
Demócratas exigen posponer confirmación del nominado hasta las elecciones de mitad de periodo
Los legisladores demócratas que integran el Senado de Estados Unidos carecen de suficientes votos para bloquear la candidatura del nominado por el presidente Donald Trump para integrar la Corte Suprema en sustitución de Anthony Kennedy, quien anunció su retiro.
Los senadores demócratas están presionando para que el proceso de confirmación se produzca después de las elecciones de mitad de período, para las que falta solo cuatro meses. El líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, rechazó esa propuesta, aunque en 2016, que también fue año electoral, se negó a celebrar audiencias para Merrick Garland, el candidato a la Corte Suprema propuesto por el entonces presidente Barack Obama.
El líder de la mayoría, Mitch McConnell, expresó: “Tengo plena confianza en la conducta del presidente [del Comité Judicial del Senado, Chuck] Grassley en el proceso venidero de confirmación en el Comité Judicial. Es imperativo que el candidato del presidente sea evaluado de manera imparcial y sin ser sometido a ataques personales”.
Fuente: Democracy Now!
