Foto: cortesía Democracy Now!
El Gobierno de Biden ha notificado al Congreso de Estados Unidos sus planes de enviar a Israel otros 1.000 millones de dólares en armamento, incluidas municiones para tanques, morteros y vehículos tácticos.
La medida se produce cuando el presidente Biden enfrenta críticas por parte del Gobierno israelí y legisladores estadounidenses republicanos tras suspender la semana pasada un envío de bombas de gran tamaño a Israel.
El nuevo paquete de ayuda militar valuado en 1.000 millones de dólares está siendo revisado por el Congreso al tiempo que Israel amplía sus ataques contra Rafah y otras zonas de la Franja de Gaza. Más de 550.000 palestinos han sido desplazados en los últimos días, mientras que el número de muertes ha superado las 35.100.
La Autoridad Palestina afirma que el 80% de los centros sanitarios de Gaza están fuera de servicio debido a los ataques israelíes.
Todo esto se produce al tiempo que los palestinos de todo el mundo están conmemorando este miércoles el aniversario número 76 de la Nakba, que significa “catástrofe” en árabe. El 15 de mayo de 1948, un día después de la creación del Estado de Israel, 700.000 palestinos fueron violentamente expulsados de sus hogares.
Muchos palestinos sostienen que actualmente se están enfrentando a una segunda Nakba. Estas fueron las palabras expresadas por Hussein Junaid, un hombre que se vio obligado a huir del campamento de refugiados de Yabalia.
Hussein Junaid: “Nos expulsaron del norte de la Franja de Gaza. Aquí estamos tirados en las calles. Destruyeron nuestras casas. Mataron a cuatro de mis hijos. Fueron martirizados. Entre ellos había un médico y un jefe de departamento. Mis cuatro hijos mayores murieron. Mis hijos fueron martirizados. Nuestras casas fueron destruidas. Nos violentaron y nos tiraron a la calle. ¿Quién nos está buscando? ¿Qué organización, qué área y qué Gobierno? Muéstrenles que estamos tirados en las calles con nuestros niños y niñas pequeños, que no tienen leche y quieren comida”.
Manifestantes a favor del pueblo palestino interrumpen una conferencia de Google
En Estados Unidos, continúan las protestas contra la guerra que Israel está librando en la Franja de Gaza. En la ciudad californiana de Mountain View, cientos de manifestantes a favor del pueblo palestino bloquearon las entradas a una conferencia de desarrolladores de software de Google. Estas fueron las palabras expresadas por Ariel Koren, una exempleada de Google.
Ariel Koren: “Estamos enviando el mensaje de que Google es la empresa que proporciona la infraestructura en la nube para los violentos crímenes de lesa humanidad que está cometiendo Israel y, por lo tanto, haremos responsable a la empresa por este comportamiento. […] No hay ninguna razón, no hay necesidad de que Google se beneficie del genocidio. Por eso nuestras demandas no son radicales, no son difíciles [de entender]. [Lo que pedimos] es realmente simple: Dar de baja al Proyecto Nimbus y dejar de hacer negocios con el Gobierno y el Ejército de Israel, que son culpables de cometer genocidio”.
Por su parte, un grupo de estudiantes de la de Universidad de la Ciudad de Nueva York ocupó brevemente el martes por la noche una biblioteca del Centro de Graduados, la que rebautizó como “Biblioteca de la Universidad de Al Aqsa” en honor a la universidad pública más antigua de Gaza, que fue destruida por Israel.
Estudiantes de Harvard ponen fin a su campamento de solidaridad con Gaza y se reunirán con autoridades
Los estudiantes de la Universidad de Harvard que habían instalado hace tres semanas un campamento de solidaridad con Gaza decidieron poner fin a este luego de que las autoridades del centro educativo acordaran reunirse para discutir la posibilidad de dejar de invertir en empresas o instituciones que se benefician de la ocupación israelí.
Estas fueron las palabras expresadas por Israa Alzamli, una estudiante de Harvard que participa de las protestas a favor del pueblo palestino.
Israa Alzamli: “En el campus de Harvard, hemos estado manifestándonos durante años a favor de Palestina. Este campamento no fue el principio ni el fin de nuestra protesta. Pero fueron unos hermosos días en los que demostramos el poder estudiantil que podemos construir. Desde el principio, el rector Garber ha dejado muy en claro que no tenía interés en negociar con nosotros. Pero los estudiantes hemos demostrado tener el poder para que, de hecho, acceda a discutir [el asunto]”.