El presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, no reunió suficiente apoyo de su propio partido para aprobar su supuesto “Plan B” que tenía la finalidad de obligar al presidente Obama a ceder con respecto al “precipicio fiscal”.
El plan de Boehner hubiera ampliado los recortes impositivos aprobados durante el gobierno de George W. Bush a prácticamente todas las personas, salvo a quienes ganan un millón de dólares al año o más.
Es bastante más del límite de 250.000 dólares de ingresos anuales que procuraba el presidente Barack Obama. El mandatario consideró una transacción de 400.000 dólares esta semana, y también ofreció recortar su meta de ingresos y permitir restricciones a los denominados derechos como la seguridad social.
Recorte de seguridad social podría afectar a los ancianos
El congresista de Ohio Denis Kucinich criticó el jueves una posible medida de transacción denominada “índice de precios al consumidor encadenado” (o “IPC encadenado”) que afectaría los pagos de la seguridad social.
Kucinich declaró: “Por ejemplo, si las personas de edad avanzada comen carne pero no pueden pagarla, pueden comer algo más barato, como alimento para gatos y el cálculo del costo de vida estaría ‘encadenado’ a ese artículo más barato, el alimento para gatos. De modo que, cuanto menos se pague por los alimentos, se obtienen menos beneficios».
«El recorte del beneficio del ‘IPC encadenado’ encadenará a las personas de edad avanzada a la pobreza de elección. No hay justificación para recortar los beneficios de la seguridad social. Digamos no a empujar a los más viejos al precipicio fiscal, no al alimento para gatos para Navidad”.
Fuente: Democracy Now!