La presidenta de México, Claudia Sheinbaum y su gabinete de Gobierno. Foto Facebook/CS
México vive un día histórico con el nombramiento de la primera mujer elegida como presidenta en el país.
Claudia Sheinbaum, científica y exjefa de gobierno de la Ciudad de México, llega al cargo después de haber obtenido una victoria aplastante en las elecciones celebradas en junio.
Sheinbaum es parte del partido gobernante, Morena, y es una aliada cercana del presidente saliente de México, Andrés Manuel López Obrador, cuyo mandato de seis años concluye hoy. El legado de AMLO, como es ampliamente conocido, será difícil de equiparar, ya que ha sido el presidente más popular de México en décadas, cuyo índice de aprobación nunca cayó por debajo del 60%.
AMLO promovió una “reformulación de la política anticorrupción desde una mirada progresista, que considera al neoliberalismo como una forma de corrupción”, señala Edwin Ackerman, profesor de sociología de la Universidad de Syracuse, quien también describe cómo las políticas económicas de López Obrador aumentaron drásticamente el poder adquisitivo de las clases trabajadoras en México.
Por otro lado, Ackerman señala que AMLO también enfrentó críticas por empoderar a los militares, incrementar el uso de combustibles fósiles e impulsar una reforma judicial altamente controvertida.