
Raheem Sterling se convirtió en el jugador inglés más caro de la historia tras completar su fichaje por el Manchester City por un monto superior a los US$76 millones.
El jugador de 20 años expresó estar contento de llegar a un equipo con posibilidades de ganar trofeos, en alusión a la falta de títulos en los últimos años del conjunto que le abrió las puertas a la Liga Premier, Liverpool.

Desde que debutó en Anfield hace tres años, Sterling se ha convertido en uno de los jugadores más elogiados del fútbol inglés, que suele acelerar el proceso de crecimiento de sus jóvenes promesas, como sucedió en su momento con Theo Walcott, Michael Owen o Wayne Rooney.
En pocos casos los futbolistas han respondido a las expectativas. En la mayoría han perdido el rumbo de sus carreras como fue el caso de Emile Heskey, David Bentley o Robert Green.
También está la presión de cargar la responsabilidad del dinero que se pagó por el jugador, algo que no siempre va acorde a su valor.
Lea: Sterling, nueva perla de Anfield
Están los casos del argentino Ángel di María (US$88 millones), el más caro del fútbol inglés, y de Andy Carroll (US$54 millones), a quien Sterling superó en la lista de los futbolistas ingleses más costosos de la historia.
Desde que debutó en la temporada 2011-2012 con el Liverpool, Sterling ha anotado sólo 23 goles en 129 partidos en todas las competiciones.

Entonces, ¿se justifica su precio en comparación con los jugadores más laureados del momento del mundo e Inglaterra?
Vea la progresión de Sterling junto a Lionel Messi, Cristiano Ronaldo y Wayne Rooney y saque sus propias conclusiones.
