Por Isaac Cohen*
La semana pasada, el Fondo Monetario Internacional divulgó una nota de discusión del personal sobre las perspectivas del crecimiento e las economías de mercado emergente. La principal conclusión del informe es que después de la década pasada de crecimiento vigoroso, desde 2010-11, las economías emergentes se están desacelerando. El informe estima que la desaceleración es sincronizada, porque abarca 80 por ciento de dichas economías, con una disminución promedio de 1,5 por ciento de crecimiento hacia fines de 2013.
Algunas de las mayores economías emergentes están creciendo menos. Por ejemplo, desde 2010, el crecimiento de China ha disminuido 2,25 por ciento, hasta 7,75 por ciento en 2013. Lo mismo en el caso de Brasil, con una disminución en su crecimiento económico de 2,75 por ciento, creciendo apenas 2,25 por ciento el año pasado.
La desaceleración sincronizada se explica en gran medida por la debilidad de la demanda externa en los principales socios comerciales, especialmente en las economías avanzadas y en China. Esto representa un cambio sustancial en los factores explicativos del intenso crecimiento de la última década, porque las condiciones externas favorables explicaba casi la mitad del auge del crecimiento económico de los mercados emergentes.
Según el informe, estas condiciones externas favorables “no se espera que prevalezcan en los años venideros.” Habrá menos crecimiento del comercio internacional, condiciones financieras restringidas y menores precios para las materias primas, todo lo cual contribuirá en el futuro cercano a menores tasas de crecimiento en las economías de mercado emergente.
*Analista y consultor internacional, ex-Director de la Oficina de la CEPAL en Washington. Comentarista de economía y finanzas de CNN en Español TV y radio.