La Casa Blanca despidió el lunes al director de comunicaciones Anthony Scaramucci, apenas diez días después de haberlo contratado. De esta manera culminó una semana tumultuosa en la que Scaramucci insultó reiteradas veces a sus colegas utilizando lenguaje vulgar y términos sexualmente explícitos.
La destitución de Scaramucci tuvo lugar apenas días después de que el presidente Donald Trump despidiera al rival de Scaramucci en la Casa Blanca, el ex jefe de gabinete Reince Preibus, y menos de dos semanas después de que el ex secretario de prensa de la Casa Blanca Sean Spicer renunciara en protesta por el nombramiento de Scaramucci. En Twitter, Trump desestimó los comentarios que sugieren que el gobierno está sumido en el caos y tuiteó para alardear sobre el mercado de valores y los números de empleo, a lo que añadió: “¡No hay caos en la Casa Blanca!”. La secretaria de prensa, Sarah Huckabee Sanders, habló el lunes en una rueda de prensa.
Secretaria de prensa Sarah Huckabee Sanders: “Creo que es muy sencillo. Ya lo dije antes: si quieren ver caos, vengan a mi casa cuando están mis tres hijos preescolares. Esto no tiene nada que ver con eso”.
Se informó que John Kelly despidió a Scaramucci, justo después de que el general retirado fuera nombrado jefe de gabinete el lunes. En la Casa Blanca, Trump elogió a Kelly por su breve mandato como director del Departamento de Seguridad Nacional.
El presidente Donald Trump declaró: “Esta es nuestra primera reunión de gabinete con el general Kelly. Será el jefe de gabinete, como ya saben. Todos lo conocemos, lo respetamos, y admiramos su trayectoria. Lo que ha hecho en el Departamento de Seguridad Nacional es un milagro. Como saben, la frontera era un problema terrible, y el cruce de inmigrantes ha disminuido alrededor de un 80%”.
Cuando Kelly era director del Departamento de Seguridad Nacional lideró las fuertes redadas realizadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) contra inmigrantes indocumentados. El ICE también ha sido acusado de tener como objetivo específicamente a activistas indocumentados para detenerlos y posiblemente deportarlos.
Fuente: Democracy Now!
