En Bruselas, la capital belga, explosiones han azotado el aeropuerto internacional y una estación del metro de la ciudad, causando la muerte a más de treinta personas y provocando decenas de heridos.
El fiscal federal de Bélgica dijo que las dos explosiones en el aeropuerto fueron llevadas a cabo por un atacante suicida.
También hubo informes de disparos efectuados antes de las explosiones en el aeropuerto, que se produjeron a las 8 de la mañana en punto.
Cerca de una hora después, hubo otra explosión en la estación de metro Maelbeek. Los primeros informes indican que quince personas murieron en la estación de metro y cerca de trece en el aeropuerto, con más de 100 heridos en ambos lugares.
Los ataques se producen solo cuatro días después de que las autoridades de Bruselas arrestaran a Salah Abdeslam, sospechoso de los atentados de noviembre en París donde murieron 130 personas. Abdeslam había huido a Bruselas tras los ataques de París.
Después de su detención en una incursión el viernes, el ministro del Interior belga había advertido que el país estaba en el mayor nivel de alerta por un posible ataque vengativo, y declaró a la radio pública que “detener una célula puede empujar a otros a la acción”.
El primer ministro Charles Michel condenó los ataques de hoy, a los que calificó como “ciegos, violentos y cobardes”, y pidió “calma y solidaridad”. Visite democracynow.org/es para ver nuestra cobertura de los atentados.