Los fiscales de Nueva York dieron un gran golpe a la polémica política de detener y cachear del Departamento de Policía de Nueva York al rehusarse a enjuiciar a las personas arrestadas por ingresar en forma ilícita en viviendas sociales del Bronx, a menos que el oficial a cargo del arresto se someta a una entrevista.
La decisión se adoptó en julio luego de que los fiscales vieran que muchos de los detenidos por ingresar ilícitamente en las viviendas sociales eran inquilinos o invitados que habían sido arrestados por error.
Los funcionarios se percataron de que la policía había proporcionado declaraciones escritas que establecían que los detenidos eran culpables de ingreso ilegal, a pesar de que después resultaron ser inocentes.
La nueva política parece haber tenido impacto en el Bronx, donde los arrestos por ingresos ilegales han caído más del 38% en comparación con el año pasado.
Datos anteriores relativos a la política de detener y cachear del Departamento de Policía de Nueva York muestran que los hombres afroestadounidenses y latinos representan un número desproporcionadamente alto de los detenidos por la policía.
Fuente: Democracy Now!