Foto: cortesía Democracy Now!
La Unión Europea anunció el lunes sanciones contra Bielorrusia, un día después de que el Gobierno de ese país desviara un vuelo comercial hacia la capital Minsk con el fin de detener a un periodista crítico del autoritario presidente de Bielorrusia.
El domingo, Bielorrusia utilizó un avión de combate para interceptar el vuelo de la aerolínea Ryanair con el pretexto de una falsa amenaza de bomba. La interceptación del vuelo provocó pánico entre los pasajeros del avión.
Una vez que el avión interceptado aterrizó en Minsk, la policía bielorrusa detuvo a Roman Protasevich, un periodista de 26 años que cubrió las recientes manifestaciones que exigían el fin del Gobierno del presidente Alexander Lukashenko, quien ha estado en el poder por 27 años.
En un video publicado el lunes en Internet, Protasevich afirmó que estaba detenido en una prisión de Minsk y confesó haber “organizado una agitación generalizada en la ciudad de Minsk”. El video muestra a Protasevich con una marca en la frente, lo que plantea dudas si fue golpeado.
Los líderes europeos han calificado el arresto de Protasevich como una interceptación y un secuestro patrocinados por el Estado y han pedido el lunes a todas las aerolíneas de la Unión Europea que no sobrevuelen el espacio aéreo de Bielorrusia.
Asimismo, las autoridades de la Unión Europea han prohibido que las aerolíneas de Bielorrusia sobrevuelen su espacio aéreo y aterricen en aeropuertos de sus Estados miembros. Estas fueron las palabras expresadas por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Ursula von der Leyen: “Esto es un ataque a la libertad de expresión y un ataque a la soberanía europea. Y este condenable comportamiento necesita una respuesta contundente”.
El presidente Joe Biden respaldó las sanciones de la Unión Europea y dijo que ordenó a su Gobierno tomar las medidas apropiadas para que Bielorrusia rinda cuenta de sus actos.
