Las protestas contra el racismo y la brutalidad policial continúan sacudiendo ciudades y pueblos en todo Estados Unidos y a nivel mundial. En la ciudad de Nueva York, aproximadamente 10.000 ciclistas recorrieron el sábado en procesión más de 32 kilómetros por el distrito de Manhattan, exigiendo justicia para las víctimas de la violencia policial.
La protesta se produjo un día después de que multitudes colmaran el puente de Brooklyn en una marcha en conmemoración del 19 de junio, fecha conocida como Junetheen o Día de la Libertad, en la que se celebra la liberación de los afroestadounidenses de la esclavitud.
En la ciudad de San Francisco, manifestantes pintaron “Dejen de financiar a la Policía” en letras amarillas gigantes afuera del Ayuntamiento, exigiendo que la alcaldesa London Breed desvíe fondos policiales a programas comunitarios.
El sindicato de trabajadores portuarios International Longshore and Warehouse detuvo el viernes el tráfico de embarques en 29 puertos a lo largo de la costa oeste, al tiempo que trabajadores portuarios celebraron Juneteenth con una huelga de un día de duración. En Washington D.C., miles de personas conmemoraron el 19 de junio con manifestaciones, marchas y una protesta en los escalones del Monumento a Abraham Lincoln.
Un manifestante proclamó: “Los afroestadounidenses no tienen libertad, justicia o igualdad. Somos esclavos del sistema. El sistema es fundado por el Gobierno de Estados Unidos. Yo, como hombre negro, y como todos los negros, solo tengo opciones basadas en la obediencia”.
Mientras tanto, en la ciudad de Ginebra, en Suiza, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU acordó encargar la realización de un informe sobre el racismo sistémico y la discriminación contra las personas negras, aunque no llegó a mencionar específicamente a Estados Unidos.