Llegó la Hora Vizcarrra

Por Santiago David Távara

No se hagan los bizcos, si ya saben «cómo es la nuez», así que a gobernar y trabajar con transparencia, porque hay muchos «mamanis» grabando para bien o para mal.

El nuevo presidente de Perú, Martín Vizcarra, asumió el poder entre el rechazo de millones de peruanos de que “se vayan todos” los políticos y la calma de los mercados financieros por la rápida transición tras la precipitosa caída de Pedro Pablo Kuczynski (PPK).

Entre la lucha intestina del fujimorismo por la difusión de los llamados Keikovideos que debilita su mayoría absoluta en el Congreso, toca al nuevo presidente llevar las riendas del país de una manera transparente con el fin de fortalecer las instituciones y devolver la confianza de los peruanos en sus representantes electos.

La renuncia de PPK, en lugar de una vacancia que impulsaba una abrumadora mayoría del Congreso desde la izquierda hasta la derecha, dificulta la convocación de nuevas elecciones.

Una posibilidad es un cierre del Congreso y la convocatoria a nuevas elecciones. Ese escenario ocurriría en caso de que acabe la “luna de miel” o un “cese al fuego político” de Vizcarra con la mayoría fujimorista que ya ha censurado un gabinete durante la breve presidencia de PPK.

En el caso de una vacancia, que puede ocurrir incluso contra el propio Vizcarra y la vicepresidenta Mercedes Aráoz si se destapan otros escándalos de corrupción, el tercero en línea en la sucesión sería el fujimorista Luis Galarreta, presidente del Congreso, quien irónicamente en el pasado fue antifujimorista. Sería Galarreta el encargado de convocar a elecciones que podrían retrasarse por juegos políticos.

Así las cosas, conviene que Vizcarra termine el mandato hasta 2021, poniendo prioridad los lineamientos de crecimiento económico y prioridades en la salud y la educación. La tarea de Vizcarra, si quiere asegurarse un buen nombre en la historia, es poner al Congreso a trabajar sobre iniciativas legislativas urgentes. En caso de un bloqueo, realizar algún tipo de presión con el apoyo de los actores sociales que representan diversas causas.

En ese tiempo, se deben fortalecer los movimientos sociales y realizar una depuración de las “manzanas podridas” de los partidos políticos. El nuevo presidente debe ser firme en marcar su distancia con pactos debajo de la mesa, para evitar correr la triste suerte del otrora llamado “presidente de lujo”.

 

Nota original publicada en el Comité De Vigilancia Distrito De San Miguel.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos Relacionados