La Oficina del Censo de Estados Unidos recientemente publicó nuevos datos que demuestran que casi 300,000 hispanos—mayormente adultos sin hijos—dejaron los rangos de la pobreza en el 2011. La proporción de latinos que viven en la pobreza disminuyó del 26.5 por ciento en el 2010 al 25.3 por ciento en el 2011, gracias en parte al hecho que más hispanos han logrado encontrar empleo. El Consejo Nacional de La Raza (NCLR) está animado de ver este mejoramiento en la situación económica de tantos latinos trabajadores, y le instó a los políticos que preserven las leyes que ayuden a prevenir que estos latinos vuelvan a caer en la pobreza. El nivel de pobreza para una familia de cuatro fue $23,018 en el 2011.
“Estamos muy contentos de ver un cambio positivo en estos números; a la vez, vemos que los datos demuestran que 13 millones de latinos siguen viviendo en la pobreza en el año 2011, seis millones de esos son niños que no tuvieron una reducción significativa de su nivel de pobreza,” dijo Leticia Miranda, asesora política del NCLR. “Tenemos mucho trabajo por delante para reducir la pobreza de nuestra comunidad latins, en particular la de nuestros niños y familias.”
Una razón por el mejoramiento económico de los hispanos fue la reducción de la cifra de desempleo que cayó de un 13.1 por ciento en el 2010 a un 11.5 por ciento en el 2011, y ha seguido reduciéndose a un 10.2 por ciento en el 2012. A la vez, la mayoría de los trabajos creados desde que comenzó la recesión son trabajos de bajo ingreso, y a muchos latinos les falta los requisitos necesarios para obtener trabajos que paguen mejores sueldos. El apoyo para la educación para adultos, y programas de capacitación siguen siendo claves para aumentar la posibilidad de que los latinos encuentren mejores trabajos que pueden sacar a sus familias de la pobreza.
Programas anti-pobreza—como el Head Start, Supplemental Nutrition Assistance Program, y el Earned Income and Child Tax Credits—también son cruciales para los latinos. Con más de un tercio de los niños hispanos en la pobreza, el apoyo para estos programas es esencial para prevenir que muchos de estos niños sufren los efectos de crecer en la pobreza.