La compañía de transferencia de dinero MoneyGram acordó establecer un fondo de indemnizaciones de 100 millones de dólares como parte de un acuerdo gubernamental por acusaciones de fraude.
Se acusa a la compañía de procesar transferencias a agentes de MoneyGram que estafaron a los clientes haciéndose pasar por familiares u ofreciendo premios en efectivo.
El Departamento de Justicia afirmó que miles de clientes de MoneyGram presentaron reclamaciones, pero que la compañía no despidió a los agentes que sabía estaban involucrados.
MoneyGram también reconoció que no había implementado un programa efectivo contra el lavado de dinero, lo que constituye una violación de las leyes federales.