Continúa la violencia generalizada en Egipto, en medio del período más sangriento de la historia moderna del país.
Alrededor de 900 personas han muerto desde que las fuerzas del Estado atacaron los campamentos de protesta de la Hermandad Musulmana.
Al menos 173 personas murieron en una protesta denominada “Día de furia” convocada el viernes por la Hermandad Musulmana, seguidas de al menos 79 muertes registradas el sábado. Alrededor de 90 oficiales de policía y soldados murieron en los incidentes violentos, pero los seguidores islámicos de la Hermandad Musulmana y del Presidente derrocado Mohamed Morsi han sido las principales víctimas.
El domingo, al menos 36 prisioneros murieron en El Cairo después de que guardias dijeron que intentaron escapar mientras eran trasladados.
Sin embargo, la Hermandad Musulmana acusó a las fuerzas estatales de “masacre a sangre fría” y exigió una investigación internacional. En el día de hoy, al menos 24 policías murieron en la provincia de Sinaí, al norte del país, tras haber sido atacados por militantes.
En noticias de último momento, las autoridades judiciales de Egipto ordenaron la liberación del dictador encarcelado Hosni Mubarak, tras absolverlo de un caso de corrupción. Un abogado de Mubarak afirma que prevé que será liberado en las próximas 48 horas.
domingo, mayo 26
