
Al menos cuatro militares estadounidenses murieron en el ataque a un centro de reclutamiento del Ejército y otro del cuerpo de reserva de los Marines en Chattanooga, Tennessee.
También falleció el autor del ataque, identificado por el FBI como Mohammad Youssuf Abdulazeez de 24 años, nacido, según medios locales, en Medio Oriente.
Los cuatro militares fallecidos pertencían al cuerpo de Marines, informó el departamento de Defensa en Washington.
El ataque dejó además tres personas heridas.

El fiscal de distrito, Bill Kilden, dijo en rueda de prensa que el incidente está siendo investigado como un «acto de terrorismo local», aunque aclaró que no descartan todavía otras hipótesis.
De acuerdo con la versión de testigos presentada por medios locales, un hombre que manejaba un Ford Mustang descapotable abrió fuego contra la oficina de la Infantería de Marina, primero, e hizo lo mismo minutos después en el segundo local, ubicado a una distancia de 10 kilómetros.
Atacante solitario
El oficial del FBI Ed Reinhold, encargado de la investigación, dijo que el primer tiroteo ocurrió cerca de las 10:45 am hora local (14:45 GMT), en el centro de reclutamiento al este de la ciudad.
Las primeras informaciones oficiales señalan que el atacante actuó en solitario.
Agentes del FBI fueron desplegados por el sur del país para colaborar con las investigaciones que realizan las autoridades locales.


«Este es un día triste para Estados Unidos. Estos oficiales sirvieron al país con orgullo y son las víctimas de estos ataques», dijo Kilden.
El alcalde Chattanooga Andy Berke tuiteó «Horrorífico incidente en nuestra comunidad… Oraciones para todos los afectados».
Varios testigos reportaron haber visto al hombre disparar desde su carro al centro de reclutamiento.
Gina Mule, empleada de un restaurant local le dijo a la cadena CNN que escuchó «ruidos realmente fuertes» y vio a un hombre con un «rifle de gran potencia».
«Hubo muchos disparos», agregó Mule.
La Casa Blanca dijo que el presidente Barack Obama ha sido informado sobre el incidente.
Un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. dijo que están «mejorando la seguridad en algunas instalaciones federales».
