Por Ramón Jiménez
Por primera vez este 2015 la región metropolitana de Washington amaneció cubierta de nieve; la que continuó cayendo hasta el mediodía.
Al final apenas cayeron unas tres pulgadas. Sin embargo, esa pequeña cantidad —si compara con las grandes nevadas de otras épocas— fue suficiente para causar un caos vehicular en las principales vías de acceso a la capital estadounidense y otros sectores de Maryland y Virginia.
Un viaje que normalmente toma entre 45 minutes y una hora desde Baltimore a la región de Washington, este día dilató cuatro horas, debido al gran congestionamiento y accidentes en la ruta I-495 (Beltway) que rodea la capital.
“Este viaje me tomó cuatro horas cuando en días normales son 45 minutos, porque salgo muy temprano de mi casa”, dijo Alicia, una panameña que junto a su esposo viajan de lunes a viernes a trabajar en un centro hospitalario de Bethesda, Maryland.
Es el mismo caso del médico salvadoreño Leonel Flores quien perdió su vuelo a pesar de haber manejado cuatro horas al aeropuerto.
«Manejé cuatro horas bajo la nieve para llegar al aeropuerto [Thurgood Marshall de Baltimore]. Los gobiernos locales de Maryland no se prepararon bien para una nevada que no debió causar tanto caos vehícular. Perdí mi vuelo….», se lamentó Flores.
La pequeña nevada —mas que todo por lo resbaladizo de las vías— hizo que algunos sistemas escolares cerraran todo el día las escuelas. Además, fue motivo para que muchos empleados y trabajadores no solamente llegaran tarde a sus puestos de trabajo sino que también salieron temprano.
Los únicos que estuvieron muy contentos fueron los niños que no fueron a la escuela y se dedicaron a jugar con las bolas de nieve.
