Foto: cortesía Democracy Now!
La baja recaudación de fondos para ayuda humanitaria es una “sentencia de muerte” para miles de menores que padecen hambre en ese país.
Naciones Unidas advierte que 400.000 yemeníes menores de cinco años podrían morir de desnutrición aguda en 2021, al tiempo que la pandemia del coronavirus y la guerra liderada por Arabia Saudí contra los rebeldes hutíes agravan la peor crisis humanitaria del mundo.
El secretario general de la ONU, António Guterres, dijo el lunes que una conferencia de donantes recaudó solo 1.700 millones de dólares para la ayuda humanitaria en Yemen, menos de la mitad de los 3.800 millones de dólares necesarios para evitar una hambruna generalizada.
Secretario general António Guterres: “Hoy, recortar la ayuda es una sentencia de muerte para familias enteras. Con una guerra en pleno auge, los menores de Yemen son quienes pagan el precio más alto”.
La ONU declaró que alrededor de la mitad de la población de 29 millones de personas de Yemen está pasando hambre. En febrero, el presidente Biden se comprometió a acabar con el apoyo de Estados Unidos a la guerra liderada por Arabia Saudí en Yemen, que comenzó hace seis años durante la presidencia de Obama.
Sin embargo, Estados Unidos se ha negado a sancionar al ministro de defensa de Arabia Saudí, el príncipe heredero Mohamed bin Salmán, por la guerra en Yemen e incluso por su aprobación del asesinato del periodista del periódico The Washington Post Jamal Khashoggi.
El portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price, dijo el lunes que el Gobierno estaba mirando hacia adelante, no hacia atrás, en lo que respecta a las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Arabia Saudí.
Ned Price: “Estamos muy enfocados en la conducta futura. Y esa es parte de la razón por la que hemos planteado esta cuestión no como una ruptura, sino como una recalibración”.
El presidente Biden está enfrentando duras críticas por no haber sancionado a Mohamed bin Salmán.