La Organización Mundial de la Salud comunicó que se prepara para reducir hasta en un 80% la ayuda humanitaria al sistema de salud de Yemen, luego de que el Gobierno del presidente Donald Trump suspendiera la entrega de fondos a ese organismo de salud mundial de la ONU.
Unos 24 millones de personas en Yemen, aproximadamente el 80% de la población, dependen de la ayuda humanitaria. Millones de yemeníes se encuentran al borde de la inanición.
Yemen se ha visto devastado desde 2015 por una campaña militar liderada por Arabia Saudí con respaldo de Estados Unidos y actualmente enfrenta también una epidemia de cólera. El primer caso de coronavirus del país fue confirmado el 10 de abril.
Estallan manifestaciones en Líbano debido al hambre que padece la población en cuarentena
En el Líbano, por segunda noche consecutiva se llevaron a cabo el martes multitudinarias manifestaciones de protesta en la capital, Beirut, así como en ciudades de todo el país, debido a la indignación de la población por el deterioro de la economía y la alarmante escasez de alimentos mientras continúa la pandemia.
Hassan Obeid expresó: “Somos jornaleros; si trabajamos, comemos; si no trabajamos, no comemos. Pedimos a Dios que la situación mejore”.
La mayor y más violenta manifestación se reportó en la ciudad de Trípoli, tras la muerte de un hombre de 26 años, quien, según se informó, recibió un disparo del Ejército libanés durante una manifestación de protesta realizada la noche anterior. En respuesta, los manifestantes incendiaron varios bancos en Trípoli, donde los enfrentamientos con los soldados continuaron hasta las primeras horas del miércoles.
La cifra de muertos por COVID-19 en Brasil supera el total de víctimas fatales de China
En Brasil, la cifra confirmada de muertes por COVID-19 ha superado el número total de fallecimientos en China reportado por la Organización Mundial de la Salud. El martes, el Ministerio de Salud de Brasil reportó aproximadamente 470 fallecimientos más que el día anterior, lo que eleva la cifra total a más de 5.000.
Por otra parte, el Supremo Tribunal Federal de Brasil autorizó una investigación por presunta corrupción y obstrucción de la Justicia por parte del presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro.
La decisión de ese tribunal tuvo lugar luego de que el exministro de Justicia Sérgio Moro renunciara el viernes tras acusar a Bolsonaro de despedir ilegalmente al jefe de la Policía Federal, quien en ese momento investigaba a aliados políticos de Bolsonaro y a dos de sus hijos. El martes, Bolsonaro designó a un amigo de la familia como nuevo jefe de la Policía Federal.
