Ronald S. Moultrie durante el testimonio en el Congreso. Foto: Lenin Nolly/MLNews.
Redacción MLNews
Dos altos cargos de los servicios de inteligencia de Estados Unidos se presentaron este martes a una audiencia en el Capitolio de Washington, tras un informe del Gobierno que registra 144 casos de “fenómenos aéreos no identificados” observados desde hace dieciocho años.
Estuvieron en la audiencia ante el subcomité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Ronald S. Moultrie Subsecretario de Defensa de EE.UU. para los servicios de inteligencia del Pentágono y Scott Bray, subdirector de Inteligencia Naval, quienes testificaron sobre lo que el gobierno sabe sobre los objetos voladores no identificados (ovnis).
Moultrie indicó que el Pentágono está tratando de desestigmatizar el problema y alentar a los pilotos y otro personal militar a informar cualquier cosa inusual que vean.
“Queremos saber qué hay ahí afuera tanto como ustedes quieren saber qué hay ahí afuera”, dijo Moultrie a los legisladores, y agregó que él mismo era fanático de la ciencia ficción.
“Recibimos las preguntas no solo de usted. Lo recibimos de la familia y los recibimos día y noche”, destacó.
La audiencia tuvo lugar a casi un año que se presentó un informe, donde se dio a conocer que se documentó 144 casos sobre los fenómenos aéreos no identificados que pilotos militares han observado desde el año 2004.
La cita de los altos funcionarios al Congreso también obedece a la exigencia presentada hace cinco meses por medio de una Ley de Autorización de la Defensa Nacional, que pidió a los militares la creación de una oficina permanente para reunir y estudiar el caso de los ovnis.
El documento también exigía un informe anual y sesiones informativas cada seis meses al Congreso estadounidense.
“El pueblo estadounidense merece total transparencia”, señaló el presidente del Comité de Inteligencia, Adam Schiff en declaraciones recientes.
Los legisladores de ambos partidos dicen que los ovnis son un problema de seguridad nacional. Se han informado avistamientos de lo que parecen ser aeronaves que vuelan sin medios perceptibles de propulsión cerca de bases militares y en las costas, lo que aumenta la posibilidad de que los testigos hayan visto tecnología china o rusa no descubierta o secreta.
Pero los avistamientos suelen ser fugaces. Algunos aparecen por no más de un instante en la cámara y, a veces, terminan distorsionados por la lente de la cámara.
Se cree que el gobierno de EEUU tiene información técnica adicional sobre los avistamientos que no ha revelado públicamente.
