Por Andy West
El año recién terminado, 2012, fue un año terrible para España, un país tan profundamente afectado por los problemas económicos que es prácticamente imposible prender la televisión o entablar una conversación sin que salga a relucir la temida palabra «crisis».
El desempleo alcanzó cifras récord, los bancos están colapsando, las marchas de protesta se han convertido en algo común, se están aplicando recortes devastadores a los servicios públicos y el rescate financiero por parte de la Unión Europea persiste como una posibilidad muy real.
En medio de toda la ruina y la tristeza, sin embargo, ha habido un significativo consuelo para mucha gente en esta nación de fanáticos del deporte: el fútbol.
En julio, España hizo historia al convertirse en la primera selección en la historia de este deporte en ganar tres trofeos de los grandes de forma consecutiva: la Eurocopa 2008, la Copa del Mundo 2010 y la Eurocopa 2012.
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El fútbol es, de lejos, el deporte más popular en España y hay un enorme sentimiento de pertenencia a ‘La Roja’, como llamamos a la selección nacional. El éxito del equipo ayudó a que la gente se olvidara de la crisis unas semanas»
Miguel Ángel Aguirre, director de la agencia de Relaciones Públicas Edelman
Más aún, el equipo entrenado por la paternalista figura de Vicente del Bosque lo logró en un estilo tan magnífico, batiendo a la peligrosa Italia 4-0 en la final, que ha sido ampliamente calificada como la selección más grande en haber jugado este deporte.
Con la atención puesta en jugadores técnicos llenos de talento como Xabi Alonso, Xavi Hernández, Andrés Iniesta y David Silva, incluso los espectadores ocasionales de fútbol quedaron boquiabiertos ante la fluidez y el suave control y toque de pelota de España, que parece haber establecido un modelo que muchos otros intentan imitar.
Miguel Ángel Aguirre, quien conoce bien el sentimiento público debido a su trabajo como director de la agencia de Relaciones Públicas Edelman en Madrid, confirma que el ánimo del país mejoró gracias al éxito del equipo de fútbol en verano.
En lo alto de la liga
«El fútbol es, de lejos, el deporte más popular en España y hay un enorme sentimiento de pertenencia a ‘La Roja’, como llamamos a la selección nacional. El éxito del equipo ayudó a que la gente se olvidara de la crisis unas semanas», dice.
«Los jugadores estaban bajo mucha presión y hubo grandes celebraciones cuando ganaron. Miles de personas se congregaron para ver la final en una pantalla gigante en el Paseo de la Castellana, una de las avenidas principales de Madrid, y el ambiente era increíble».
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Mucha gente en este país tiene graves problemas y se preocupan de lo que van a comer mañana»
Tomás Obrado Cugat
Y no es sólo en el ámbito internacional donde el fútbol español destaca.
La competición de los mejores clubes, la Liga, está firmemente establecida como una de las ligas nacionales de mayor calidad en el mundo, en la que destaca el «Clásico», el partido entre Barcelona y Real Madrid, que cuenta con los dos mejores jugadores del mundo del momento: Leonel Messi y Cristiano Ronaldo.
No obstante, incluso el exitoso mundo del fútbol en España tiene una nube negra, porque si se observa más de cerca, se perciben serias divisiones sociales.
En la comunidad autónoma de Cataluña, en el noreste del país, el creciente peso del nacionalismo catalán hizo que la victoria de España en la Eurocopa 2012 fuera recibida con cierta indiferencia.
«La mayor parte de la gente no está particularmente interesada en el equipo nacional. Fue positivo el hecho de que la selección incluyera algunos jugadores del Barcelona pero, para los catalanes, los números uno, dos y tres son Barça, Barça y Barça», señala Tomás Obrado Cugat, nacido en Cataluña y encargado de mantenimiento en un bloque de apartamentos en Barcelona.
«El Barcelona es, de hecho, nuestro equipo nacional. Es un equipo para toda Cataluña, no sólo para la ciudad de Barcelona», opina.
Esto no es nada nuevo. Hay, por supuesto, una larga (y a veces sangrienta) historia de antipatía entre el gobierno central de Madrid y algunas regiones, especialmente Cataluña y el País Vasco.
‘Financiando a España’
Miles de personas se congregaron para recibir a la selección.
El fútbol ofreció un escenario público para este largo antagonismo a finales de mayo, cuando la final de la Copa del Rey entre los catalanes del Barcelona y los vascos del Athlétic de Bilbao, que se jugaba en Madrid, fue precedida por silbidos de los seguidores de ambos equipos al escuchar el himno nacional.
El nivel de sentimiento nacionalista ha crecido enormemente desde el estallido de la crisis financiera, con muchos catalanes reprochando el hecho, como ellos lo perciben, de que la riqueza generada en su región se utiliza para financiar los errores del gobierno central en Madrid.
En los últimos meses se ha hecho más presente el movimiento hacia la creación de una Cataluña independiente, con las elecciones regionales de noviembre dando una mayoría de los votos a los partidos proindependencia que han propuesto organizar un referendo sobre el tema, pese a las advertencias de Madrid respecto a la ilegalidad de esta medida.
El estado de tensión se ha aliviado de alguna manera por el espectacular comienzo del Barcelona en la liga de fútbol: han ganado más puntos después de 15 partidos que cualquier otro equipo en la historia de la Liga.
Pero aunque el admirado estado de forma del equipo ha sido motivo de alegría, la gente es consciente de que el fútbol sólo puede aportar una parte.
Como dice Obrado Cugat, «mucha gente en este país tiene graves problemas y se preocupan de lo que van a comer mañana.
«Para ellos, el fútbol no es importante; el fútbol no te alimenta».
Fuente: BBC Mundo