El candidato a la presidencia estadounidense Mitt Romney venció al Presidente Barack Obama en una nueva encuesta nacional realizada tras el primer debate que mantuvieron la semana pasada.
Según el centro de investigaciones Pew Research Center, Romney lleva la delantera a Obama por cuatro puntos porcentuales entre votantes que muy probablemente acudirán a las urnas, luego de haber estado ocho puntos porcentuales detrás de él el pasado mes.
Ambos se encuentran empatados entre los votantes registrados con un 46%, lo que representa el porcentaje más bajo de Obama en las encuestas Pew en más de un año. El pasado lunes, Romney pronunció un discurso en el que atacó la política exterior del Presidente Obama, que será el tema de su próximo debate la semana entrante.
Mitt Romney afirmó: “Sé que el Presidente desea un Medio Oriente más seguro, más libre y más próspero, aliado de Estados Unidos. Comparto ese deseo, pero el deseo no es una estrategia. No podemos apoyar a nuestros amigos y vencer a nuestros enemigos en Medio Oriente cuando nuestras palabras no son apoyadas por actos, cuando nuestro presupuesto de defensa sufre recortes importantes y arbitrarios, cuando no tenemos agenda comercial que tratar y cuando nuestra estrategia no se percibe como una sociedad, sino como pasividad”.
Obama reprueba a Romney por política exterior, tema del próximo debate
Las palabras de Romney fueron pronunciadas en el Instituto Militar de Virginia. Más tarde ese mismo día, mientras realizaba actos de campaña en San Francisco, el Presidente Obama dijo que Romney no tiene razón al haberse opuesto a la reducción de la guerra de Irak.
El Presidente Obama expresó: “El gobernador Romney tiene un punto de vista diferente. Dijo que fue trágico haber puesto fin a la guerra de Irak. En un discurso que pronunció hoy, repitió que cree eso. Dijo que poner fin a la guerra fue un error. No estoy de acuerdo. Traer de regreso a casa a nuestros soldados fue lo correcto. Y todo valiente estadounidense que lleve puesto el uniforme de este país debe saber que mientras yo sea comandante en jefe, mantendremos el ejército más poderoso que el mundo haya conocido, y que cuando nuestros soldados se saquen el uniforme les serviremos tan bien como ellos nos han servido”.
En su discurso, Obama se refirió además a su actuación durante el debate en Denver de la semana, pasada diciendo que había recibido las críticas de sus seguidores por haber sido “demasiado simpático”.
El Presidente Obama afirmó: “Después del debate, un montón de amigos vinieron a decirme: ‘No seas tan amable. No seas tan simpático’. Sin embargo, quiero que todos comprendan algo: lo que se estaba poniendo de manifiesto allí no era el arte del liderazgo, sino el arte de vender”.
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