Foto: cortesía Democracy Now!
Estados Unidos procura acelerar las negociaciones de paz en ese país asiático.
En Afganistán, un atentado con coche bomba en la provincia occidental de Herat dejó al menos ocho muertos y más de 50 heridos el viernes. La mayoría de las víctimas eran civiles.
Ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad por el ataque. A principios de marzo, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, le escribió al presidente afgano Ashraf Ghani en una iniciativa para acelerar un acuerdo que ponga fin al conflicto de décadas de duración en vísperas de la reunión propuesta en Turquía.
El periódico The New York Times informa que Estados Unidos tiene alrededor de 3.500 soldados desplegados en Afganistán, cerca de 1.000 más de lo que se había revelado previamente.
Según un acuerdo alcanzado por el Gobierno de Donald Trump, Estados Unidos tiene programado retirar a sus fuerzas armadas de Afganistán antes del 1 de mayo, aunque aún no está claro si Biden respetará ese cronograma.
Birmania es testigo del día más mortífero de las manifestaciones contra el golpe de Estado
EE.UU. otorga el estatus de protección temporal (TPS) a la población birmana.

Los dirigentes militares de Birmania han extendido la ley marcial después del día más mortífero de violencia política desde el golpe de Estado del 1 de febrero que derrocó al Gobierno civil electo de Aung San Suu Kyi y su partido, la Liga Nacional para la Democracia.
El domingo, al menos 38 personas murieron a manos de soldados birmanos en todo el país, con informes generalizados de que las fuerzas de seguridad dispararon balas de munición real contra las multitudes de manifestantes no violentos.
Una agrupación en defensa de los derechos humanos anunció que al menos 126 personas han muerto y que más de 2.100 fueron arrestadas desde el golpe de Estado. Un Gobierno civil paralelo en el exilio está pidiendo una “revolución” para derrocar a la junta militar.
Mientras tanto, en Estados Unidos, el Gobierno de Biden ha otorgado el estatus de protección temporal por 18 meses a la población birmana que vive en el país.