El envío forzado a sus países de origen continua a un ritmo récord a pesar de una menor afluencia inmigratoria.
Nuevas cifras muestran que Estados Unidos va en camino de llegar a la cantidad sin precedentes de deportaciones de inmigrantes indocumentados que se registró el año pasado.
El Departamento de Seguridad Nacional afirma que ha deportado a 366.000 personas a tan sólo un mes de finalizar el año fiscal 2012.
Cerca de 392.000 inmigrantes fueron deportados en el año fiscal 2011, a pesar de que el ingreso ilegal de inmigrantes por la frontera fue el más bajo en 40 años.