Los republicanos del estado de Texas están redoblando sus esfuerzos para limitar el derecho al voto. Durante una sesión legislativa especial los legisladores republicanos dieron a conocer una serie de nuevas medidas que impondrían restricciones generalizadas a la participación electoral.
Los proyectos de ley eliminarían la posibilidad de votar desde los vehículos y los centros de votación habilitados las 24 horas. Asimismo, penalizarían a los funcionarios electorales que envíen a los votantes boletas de votación a distancia que no hayan sido solicitadas.
Las medidas también impondrían estrictos requisitos para la coincidencia de firmas y aumentarían el poder de los denominados “observadores electorales”, grupos de seguidores que se apostan en los centros de votación para “vigilar” el proceso electoral y que muchas veces intimidan a los votantes.
Las nuevas restricciones —que afectan principalmente y de manera desproporcionada a los votantes de color— se producen después de que los legisladores demócratas de Texas realizaran un paro a fines de mayo para impedir que el órgano legislativo controlado por los republicanos aprobara este amplio proyecto de ley que limita el derecho al voto.