El especialista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI) aseguró que una comparación del Banco Mundial dice que países de ingresos similares al salvadoreño tienen una administración pública que supera el 30% del Producto Interno Bruto (PIB).
“Esto es importante porque no le podemos pedir peras al olmo, no le podemos pedir al Estado salvadoreño que nos parezcamos más a Alemania si estamos invirtiendo la tercera parte de lo que invierte el Estado alemán en el bienestar y el crecimiento económico”, confirma Menkos.
Además señaló que la persistencia del déficit fiscal, junto al efecto del sistema de pensiones es terrible para las finanzas públicas que se agregan a una deuda pública que se va haciendo más pesada.
Asegura que sobre los ingresos tributarios como fuente principal de recursos en la región, solo Panamá tiene otro tipo de ingresos, “el resto de países se quedaron sin empresas públicas y las pocas que tienen no generan grandes utilidades”.
Según las investigaciones del ICEFI, la gran mayoría de países en Centroamérica basan sus posibilidades de ingresos públicos en las posibilidades que tengan de recaudar. Por supuesto los ingresos tributarios tienen una importancia mucho más creciente en la medida que las pocas empresas que quedan no producen grandes utilidades.
Además concluyó señalando que el 90% de los ingresos tributarios en El Salvador provienen del IVA, del impuesto sobre la renta y de los derechos arancelarios de importación, aunque estos últimos van en declive desde largo tiempo debido a los privilegios arancelarios.
La falta de una política monetaria, también limita el margen de maniobra del Estado salvadoreño y le dejan como única herramienta para la gestión económica, la gestión fiscal.
