Por Vanesa Jiménez
Ahí está el cuerpo. Sin habeas corpus, ahí tienen el cuerpo. Unos papeles y
es suyo, llévense el envase de su pariente. Cuentan ustedes con un cuerpo.
Que les conste que lo reciben sin quemaduras ni moretones. Podríamos haberlo
golpeado al menos, que ya hubiera estado pago. Pero nosotros preferimos no
hacerlo, eso que sí hizo este cuerpo que ustedes van a enterrar.
No lo tiramos desde un avión, no lo animamos a cantar con descargas de
picana. Que cante, por ejemplo, dónde están nuestros cuerpos, los de
nuestros compañeros.
No fue violado.
No tuvo un hijo acostado en el pecho mientras le daban máquina.
No lo fusilamos para decir que murió en un enfrentamiento.
No lo mezclamos con cemento.
No lo enterramos en cualquier parte como NN.
No le robamos a sus nietos. Acá tienen el cuerpo.
Vanesa Jiménez escribe desde Buenos Aires, Argentina.
Fuente: ARGENPRESS CULTURAL