Que hacer cuando un oficial migratorio llegue a su casa

El organizador Jorge Méndez ofrece infromación. Foto: Miguel A. Álvarez.
El organizador Jorge Méndez ofrece infromación. Foto: Miguel A. Álvarez.

Organizadores comunitarios de Casa de Virginia asistieron este jueves al Consulado de El Salvador en Woodbridge, Virginia para alertar a las familias sobre lo que se debe hacer en caso de que oficiales del Servicio de Inmigración (ICE) lleguen a tocar la puerta de la casa.

En primer lugar alertaron que de verse envuelto en una situación de esas las personas tienen que permanecer en silencio, negar el ingreso al hogar (si el oficial no tiene una orden judicial para ingresar a su casa). Pero si el oficial dice que tiene una orden de cateo debe pasarla por debajo de la puerta, para comprobar que está firmada por un juez o magistrado.

Recomendaron los organizadores no responder al oficial de ICE y pedir permiso para hablar con un abogado. También recomendaron no compartir información sobre su estancia en Estados Unidos o su país de origen. Tampoco mentir sobre su estatus migratorio o edad.

Además sugirieron no firmar nada, especialmente si es una orden de deportación sin antes no hablar con un abogado. No mostrar ningún documento si el agente no tiene una orden de cateo a allanamiento.

 

Hay que planificar con anticipación.

Memorizar el número de teléfono de un abogado de inmigración o de una organización comunitaria que pueda ayudarle. ICE podría decomisarle el celular por eso tiene que memorizar esos datos.

La persona tiene que conocer su estatus migratorio, ya que si lo detienen será más fácil ayudarle si sus documentos están en orden.

Los padres con niños tienen que hacer un plan para ver quien puede cuidar sus hijos en caso que fuera detenido.

Wendy Jiménez, de Casa de Virginia. Foto: Miguel A. Álvarez.
Wendy Jiménez, de Casa de Virginia. Foto: Miguel A. Álvarez.

 

El cónsul Rudy Lazo (al micrófono) con miembros de la comunidad. Foto: Miguel A. Álvarez.
El cónsul Rudy Lazo (al micrófono) con miembros de la comunidad. Foto: Miguel A. Álvarez.

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