Las órdenes migratorias de Donald Trump generaron la indignación y el rechazo de líderes a nivel mundial.
El presidente de Francia, François Hollande, urgió a los líderes europeos a que “hagan frente” a Trump y afirmó que el presidente estadounidense estaba alentando al extremismo.
Un portavoz de Angela Merkel afirmó que la canciller alemana le dijo a Trump, durante una conversación telefónica, que corre el riesgo de violar una disposición del convenio de Ginebra que establece la necesidad de recibir a los refugiados de guerra por motivos humanitarios.
Por su parte, el gobierno de Irán afirmó que pronto adoptaría “medidas recíprocas” para prohibirles la entrada a ciudadanos estadounidenses.