Y en Connecticut, una madre indocumentada se refugió en la iglesia pentecostal de New Haven para evitar ser deportada a Guatemala.
Nury Chavarría es madre de cuatro hijos y vive en Estados Unidos desde hace 24 años. Desde 2011 se ha presentado a los controles regulares de la Agencia de Inmigración y Control de Aduanas, pero en el último, hace unos meses, se le ordenó que abandonara el país antes del 20 de julio.
Estas son las palabras de Nury Chavarría y su hija Hayley en una conferencia de prensa frente a la iglesia el jueves.
Hayley Chavarría: “Mi madre, Nury Chavarría, es alguien a quien amo más que a nadie en el mundo. No es una delincuente”.
Nury Chavarría: “Quedé estupefacta. No puedo creerlo. Le dije que no soy una delincuente. Soy una madre con cuatro hijos”.
