Guardaba mi poesía,
atrapada entre las sombras
de mi alma.
A oscuras…
en la caverna de mis sueños,
en silencio…
mis versos se agolpaban.
Y llegado el día
los versos liberados…
fueron espejos cristalinos
de mi alma
sobre el ocre profundo
de la vida.
Y mis versos escribieron
realidades…
amores…
y nostalgias…
hilvanando retazos
de mi historia
casi olvidados…
Mi poesía son los versos
que entrelazan
los anhelos de mi alma
con el realismo inexorable
de la vida.
Son los versos
tiernos…
doloridos…
ilusionados…
que desatan mis deseos…
mis tristezas…
mis lamentos…
Mi poesía son los versos
de mi infancia de inocencias
entre glicinas y alelíes
en mi patio de ciruelos…
Son los versos
de románticas quimeras
de mi tierna adolescencia…
Los versos que aún hoy,
habitan en mi alma,
emocionados y sinceros…
Mi poesía son los versos
que consuelan
la finitud de mis tiempos…
volviendo eternos,
a todos mis sueños.
Imagen de Virginia de la Puente.
Liliana Perusini escribe desde Santa Fe, Argentina
Fuente: ARGENPRESS CULTURAL