Por Isaac Cohen*
Como en teología, en economía también hay misterios. La diferencia es que en teología hay un Arbitro Supremo que en última instancia puede resolver cualquier misterio, mientras que muchos misterios económicos permanecen irresueltos.
Por ejemplo, por primera vez desde la Gran Recesión de 2008, las economías avanzadas están creciendo moderadamente. Sin embargo, algunas de ellas, como Alemania, Estados Unidos y Japón, están acercándose al pleno empleo, pero la inflación ha permanecido debajo de las metas del banco central. En Estados Unidos, durante cinco años, la inflación ha permanecido debajo de la meta de 2 por ciento. En Japón la inflación sigue cercana a cero y en la zona del euro también está debajo de 2 por ciento. La Presidenta de la Reserva Federal Janet Yellen reconoció que es “imperfecta” la comprensión de la inflación y describió la caída de los precios de este año como un “misterio.”
Hay más misterios. Después de la Gran Recesión, hay evidencia mundial de una desaceleración en la productividad, a pesar de los avances espectaculares en la innovación y el cambio tecnológico, en sectores como la informática y la energía. Además, quizás relacionado con el rezago de la productividad, los salarios han aumentado lentamente, a pesar de la fortaleza del mercado laboral y el casi pleno empleo.
Aún así, ha habido algún progreso en los últimos años. La Reserva Federal reveló que los activos netos en 2016 de una familia promedio en Estados Unidos ascendieron a $97,300, un aumento de 16 por ciento ajustado por inflación, desde 2013. No obstante, los beneficios estaban concentrados, porque la mitad de todos los hogares en Estados Unidos en 2016 tenían ingresos menores a los del año 2000.
*Analista y consultor internacional, ex-Director de la Oficina de la CEPAL en Washington. Comentarista de economía y finanzas de CNN en Español TV y radio, UNIVISION, TELEMUNDO y otros medios.