Por Ramón Jiménez
Un Museo del Deporte que reconozca el aporte de muchos estudiantes para que el nombre del Instituto Nacional de San Miguel (INIM) se mantenga en alto será pronto una realidad, dieron a conocer exalumnos de esa institución educativa durante un encuentro celebrado este sábado en Montgomery Village, Maryland.
El encuentro trajo emotivos recuerdos y sorpresas para quienes asistieron a la cita, ya que algunos no se habían visto desde hacía casi 40 años; otros tuvieron problemas para reconocerse.
La distancia ha sido un factor que les ha impedido encontrarse en persona, ya que algunos llegaron desde Carolina del Norte, Pennsylvania, New Jersey, Virginia mientras que un tercer grupo llegó desde El Salvador, solo para ver de cerca a sus amigos de la adolescencia.

Entre los asistentes estuvo el futbolista Nelson “Tribilín” Reyes, exjugador de los equipos Aguila y Dragón de San Miguel.
“No solamente tengo el orgullo de haber sido Campeón Nacional con el INIM en 1978 sino también Campeón Nacional del fútbol mayor salvadoreño con Aguila en la temporada en 1982-83”, destacó Reyes, quien llegó desde New Jersey.
“El INIM ha sido cuna de muchos deportistas famosos a través de los años y me parece bien que se reconozca su labor con la creación del Museo”, apuntó.
Aunque por la edad ya solo practican el fútbol aficionado, la mayoría también coronaron sus profesiones como es el caso del ingeniero Ricardo Soriano, a quien todos conocen todavía por «Chengo», un apodo heredado de la familia. Soriano hizo un viaje expreso desde la capital salvadoreña para estar presente en el encuentro.
Alonso Trujillo, un técnico que cuenta con licencia nacional en Estados Unidos para dirigir equipos infantiles y juveniles, adquirió sus conocimientos en sus años con el INIM.
“Pero no es lo mismo haber jugado que enseñar”, dijo. “Mas que todo que con el INIM no era una obligación jugar sino un honor”, enfatizó el ex back central del C.D. Dragón.

El ex técnico y profesor Max Cubas está listo para que se eche a andar el proyecto del Museo.
“Necesitamos hacerle conocer a los jóvenes de hoy de lo que han hecho otros muchachos quienes han cosechado bastante por el deporte, no solamente en fútbol, sino también en otras ramas”, señaló.
Reconoció Cubas que la base para que el proyecto camine está en lo económico y destacó la labor que el empresario y exestudiante Elmer Arias —residente en Virginia— lleva a cabo, ya que aparte de lo que podría ser el Museo del Deporte, también ha recaudado fondos para la ampliación y mejora de la cancha deportiva de esa institución educativa, obra que finalizó a finales de 2013.

Para el subdirector del INIM, David Pérez la creación del Museo sería un incentivo para la presente generación.
“Que los jóvenes de hoy conozcan de lo que fueron capaces los atletas de antes”, puntualizó Pérez vía telefónica.
El Instituto Nacional Isidro Menéndez de San Miguel, en el oriente salvadoreño, fue fundado hace más de 75 años y por su salones han pasado miles de estudiantes. En la actualidad cuenta con una población que ronda unos 3 mil alumnos y cada año finalizan su educación secundaria (bachilleratos en diferentes ramas) unos 800 graduados.
Por muchos años el INIM funcionó en una antigua casona en las cercanías de la Gobernación Política Departamental de San Miguel, que luego fue un local ambulatorio del Centro Universitario de Oriente, que en la actualidad ocupa el Centro Escolar María Escobar Granillo.