El presidente Barack Obama interrumpió sus vacaciones anuales en Hawái para su regreso a Washington con el fin de mantener negociaciones relativas al denominado precipicio fiscal.
Obama y congresistas republicanos procuran alcanzar un acuerdo antes de que entre en vigencia la semana próxima otra serie de recortes de gastos y aumentos de impuestos. El viernes, Obama expresó que mantiene la esperanza de poder alcanzar un acuerdo.
El mandatario afirmó: “Nadie puede obtener el 100% de lo que quiere y no se trata de un concurso entre partidos en términos de quién luce bien y quién no. Hay consecuencias mundiales reales en relación a lo que aquí se hace. Pueden decir que soy un optimista sin remedio pero de veras creo que podemos hacerlo».
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