Karoline Leavitt junto a Kevin Hassett (izq.) y Michael Waltz. Foto: Lenin Nolly/ML Noticias
Redacción ML Noticias
El haber firmado un total de 72 órdenes ejecutivas en su primer mes de trabajo tras el regreso de Donal Trump a la presidencia de EE.UU., destacó como “logros” la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
Es que desde su primer día de trabajo Trump firmó 26 decretos presidenciales, la mayoría para derogar decretos de su antecesor.
“Un mes después el presidente Trump ha firmado un total de 72 decretos, muchos más que sus predecesores”, destacó Leavitt.
Tambien, Leavitt remarcó que Trump ha firmado el doble que el presidente Joe Biden (32) el primer mes; y casi cinco veces más que Barack Obama, quien solo firmó 15 órdenes ejecutivas en el mismo periodo de tiempo.
Durante la conferencia de prensa este jueves 20 de febrero, Leavitt estuvo acompañada por el consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Michael Waltz y por el director del Consejo de Economía Nacional, Kevin Hassett.
Trump se ha centrado principalmente en el desmantelamiento del Estado federal, la desregulación, la lucha contra las políticas de igualdad de derechos, identidad de género y equidad.
Sin embargo, la economía y la inflación, que ya estaban en el centro de su campaña, hasta ahora han recibido una sola orden ejecutiva, que por cierto no tiene como objetivo reducir el costo de la vida, que cada vez se dispara más.
Eso ha hecho que su popularidad baje al 46,6% que es menor de la que tenía cuando asumió la presidencia el 20 de enero, según datos de la encuestadora FiveThirtyEight.
La misma fuente señala que solo un 34% de los encuestados apoyan la mayoría de sus políticas, mientras que el 24% no apoya ninguna.
Increiblemente, la política de expansión territorial de Trump obtiene altos resultados; donde el 72% entre los republicanos están de acuerdo con la anexión del Canal de Panamá, el 57% de Groenlandia, el 42% de Canadá y el 34% de Gaza.
Pero el 48% de los estadounidenses tiene una opinión desfavorable del presidente Donald Trump, lo que indica que todavía existe una polarización en la población.
