El gobierno alemán restableció los controles fronterizos, a raíz de la llega de un número récord de refugiados y migrantes durante el fin de semana.
El ministro del Interior, Thomas de Maizière, indicó que se trata de «medidas temporales» que se concentrarán en la frontera con Austria.
«Alemania está introduciendo temporalmente nuevos controles fronterizos a lo largo de las fronteras interiores. Inicialmente la atención se centrará en la frontera con Austria», dijo Maizière en una conferencia de prensa.
Horas antes, el sistema austriaco de trenes dijo que todos los trenes en Alemania fueron cancelados a las 15: 00 GMT.
Las autoridades de Múnich están considerando hacer un refugio temporal para migrantes en la sede de las olimpiadas de 1972.
La corresponsal de la BBC en Viena, Austria, Bethany Bell, informó que los servicios fueron suspendidos hasta la madrugada del lunes y que el gobierno de ese país se encuentra reunido para discutir cómo manejarán la situación.
«El objetivo de estas medidas es limitar los flujos actuales hacia Alemania y volver a los procedimientos establecidos cuando personas ingresan al país».
Hace pocas semanas Alemania anunció que espera que 800.000 migrantes lleguen al país este año.
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13.000 personas el sábado
Sólo a la ciudad de Múnich llegaron más de 13.000 personas buscando asilo el sábado, y la mañana del domingo las autoridades informaron que habían ingresado otras 1.400.
El ministro del Interior no dio detalles del funcionamiento de los controles fronterizos aunque dijo que las medidas podrían conducir a la interrupción de los servicios ferroviarios.
Muchos ciudadanos en Europa han manifestado su solidaridad con los refugiados instando a sus gobiernos a acogerlos.
Maizière dijo que Alemania ha mostrado su disposición para colaborar pero agregó que la carga debe ser dividida más equitativamente entre los estados miembros de la Unión Europea.
Le pidió a otros países de la UE «respetar las reglas» que estipulan que los refugiados deben solicitar asilo en el país al que llegan por primera vez, asegunrando que los refugiados «no pueden elegir» los países de acogida en la UE.
Muchos migrantes se han negado a registrarse en países como Grecia o Hungría, por temor a que se obstaculice su asilo en Alemania o en otras naciones de la UE.
El mes pasado, Maizière dijo que el acuerdo Schengen que permite la libre circulación entre un gran número de países europeos, podría ser suspendido.
El diario austriaco Kronen Zeitung informó que la policía del estado alemán de Baviera comenzará a realizar controles «para determinar de inmediato quién tiene derecho de asilo», pero todavía no está claro cómo se harán dichos controles.
Europa en su conjunto está luchando para hacer frente a una enorme afluencia de personas que huyen de la violencia, la mayoría provenientes de Siria, pero también de Afganistán, Eritrea y otros países de Medio Oriente y África.
Las autoridades de Múnich están considerando usar la sede deportiva de los los Juegos Olímpicos de 1972, el Olympiahalle, como refugio temporal.
Muchos en muy poco tiempo
Por su parte, el vicecanciller y ministro de economía alemán Sigmar Gabriel advirtió este domingo que el país se ha extendido hasta sus límites por los recién llegados.
La semana pasada, Gabriel dijo que Alemania podría aceptar 500.000 solicitantes de asilo al año durante varios años.
El gobierno de Hungría está construyendo una valla alambrada a lo largo de su frontera con Serbia para impedir el paso de migrantes.
«La incapacidad de Europa para hacer frente a la crisis migratoria ha traído incluso Alemania hasta el límite de sus capacidades», aseguró el ministro al diario Der Tagesspiegel.
«No es sólo una cuestión del número de migrantes, sino también la velocidad a la que están llegando que hace la situación tan difícil de manejar», explicó.
Gabriel también pidió a los países europeos, los estados del Golfo y a Estados Unidos contribuir con miles de millones de euros para escuelas, alojamiento y alimentación en campos de refugiados del Medio Oriente.
«Simplemente no es justo que miles de millones se puedan transferir en pocas semanas para rescatar bancos, pero la comunidad internacional no pueda ni siquiera dar una fracción de eso cuando se trata de seres humanos», dijo.
Muchas de las personas que buscan refugio han llegado por el Mar Mediterráneo a Grecia e Italia.
Mientras tanto un flujo constante de migrantes se desplaza desde Grecia, a través de Macedonia, Serbia y Hungría, hacia Austria y Alemania.
Hungría tiene el objetivo de terminar valla de alambre de cuatro metros de altura a lo largo de la frontera con Serbia, el 15 de septiembre, cuando entran en vigor medidas más severas, incluida la detención de inmigrantes ilegales.
La semana pasada, la Comisión Europea anunció un plan de cuotas obligatorias para repartir 120.000 solicitantes de asilo adicionales entre los 25 países miembros.
Hungría, República Checa, Eslovaquia y Rumania se oponen a ello.
