En esa dirección apunta la muerte de la estudiante Jaelynn Willey, de 16 años de edad, tras recibir disparo en una escuela secundaria de Maryland.
En Maryland falleció una adolescente de 16 años que recibió un disparo en la cabeza en la secundaria Great Mills de Maryland la semana pasada.
Jaelynn Willey fue desconectada del sistema de soporte vital después de que los médicos declararan su muerte cerebral.
La adolescente fue herida de bala por un compañero de estudios, Austin Rollins, con quien las autoridades afirman que pudo haber tenido una relación en el pasado.
Los expertos sostienen que hay fuertes conexiones entre la violencia doméstica y la violencia armada.