Foto: Protesta frente al Capitolio en Washington, D.C. Foto: Lenin Nolly/MLNews
Redacción MLNews
A pesar del fallo unánime de la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos esta semana, de que los beneficiarios del Programa de Residencia Temporal (TPS) que ingresaron a este país de una forma irregular no pueden solicitar una residencia permanente, miembros de ese programa afiliados a la Alianza Nacional TPS se manifestaron este jueves frente al Capitolio en Washington, D.C.
El evento frente a ese edificio federal fue parte del Día Nacional de Acción, una manifestación pacífica que se tiene lugar después de la resolución de la Corte Suprema de Justicia, que falló en contra de la demanda del salvadoreño José Santos Sánchez, quien interpuso una queja formal para que se levante la restricción legal hacia los miles de beneficiarios del TPS que ingresaron a Estados Unidos de forma irregular (sin la visa requerida).
Algunas personas como Luis E. Palacios recordaron que este gobierno dijo que en los primeros cien días harían algo por una reforma migratoria.
“Cuando están en las elecciones todo prometen, ahora se olvidan como siempre”, señaló Palacios.
También el dirigente de la Alianza Nacional TPS, Antonio Vásquez hizo alguno recordatorios importantes sobre las promesas no cumplidas de muchos políticos.
“Les recordamos a los senadores Mark Warner y a Tim Kaine (demócratas de Virginia) que es tiempo que actúen; Warner nos ofreció ayudar para que los tepesianos de este Estado puedan conseguir la residencia», recordó.
«Ahora les decimos a Warner y a Kaine que es tiempo de actuar, que ya basta de jugar con el pueblo, ya basta de engaños; los tiempos políticos cambian. Si ellos no logran hacen nada, el próximo años van a tener serios problemas en las elecciones, ahí es cuando les vamos a pasar la factura”, sentenció Vásquez.
Aseguran los dirigentes de esa organización —con capítulos en diferentes ciudades estadounidenses— que seguirán manifestándose cuantas veces sea necesario como lo han dicho por muchos años, para recordarle a los gobierno en turno, en este caso la Administración Biden, que esperan los legalice a pesar de que la Corte Suprema ya se manifestó.
Existen otras formas que el presidente estadounidense puede utilizar, como es una orden ejecutiva, que no necesita ser autorizada por la Cámara de Representantes y el Senado de Estados Unidos.
