Foto: cortesía Democracy Now!
Al mismo tiempo, más naciones inician un confinamiento y el Papa pide igualdad en la distribución de las vacunas.
Los casos y las muertes por coronavirus están aumentando en gran parte del mundo, incluidos América Latina, Europa y el sur de Asia. Además, India ha registrado más de 100.000 casos diarios de COVID-19 por primera vez desde el inicio de la pandemia. India es el segundo país en alcanzar ese trágico hito, después de Estados Unidos.
El estado indio de Maharashtra, donde se encuentra la ciudad más poblada del país, Mumbai, anunció un confinamiento para los fines de semana y un toque de queda para los días de la semana. Asimismo, el vecino Bangladesh ha iniciado un confinamiento de una semana de duración para frenar el aumento de los casos de coronavirus.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, ha dado positivo por COVID-19. Fernández recibió la vacuna rusa Sputnik V en enero.
Perú registró el sábado una cifra récord de casi 300 muertes diarias por la COVID-19, al tiempo que la nación se prepara para votar por un nuevo presidente y nuevos representantes del Congreso el próximo fin de semana.
Perú ha estado sumergido en una crisis política a raíz del denominado “golpe de Estado legislativo” de noviembre de 2020, en el cual se destituyó al expresidente Martín Vizcarra. Además, el país se encuentra en medio de un escándalo de corrupción después de que funcionarios del Gobierno recibieran vacunas contra el coronavirus antes que la población general.
En Europa, Francia ha iniciado un tercer confinamiento nacional al tiempo que las unidades de cuidados intensivos se llenan hasta el tope de su capacidad de pacientes con coronavirus. En el Vaticano, mientras Italia imponía un confinamiento para el fin de semana de Pascua, el papa Francisco pronunció un sermón en una misa reducida en la Basílica de San Pedro, donde advirtió contra el nacionalismo de las vacunas.
Papa Francisco: “Insto a toda la comunidad internacional a un compromiso común para superar los retrasos en la distribución de las vacunas y a promover su reparto, en especial en los países más pobres”.
