El presidente Obama prometió vetar un acuerdo fiscal propuesto de 440 mil millones de dólares que, según la Casa Blanca, favorece a las grandes empresas y perjudica a las familias trabajadoras.
El acuerdo entre los republicanos de la Cámara de Representantes y el líder de la mayoría del Senado, Harry Reid, serviría esencialmente para enriquecer a las empresas, a la vez que excluiría las medidas que consagran dos grandes logros para las familias de la clase trabajadora: el crédito tributario por ingreso del trabajo y el crédito impositivo por hijos.
El Centro de Prioridades Presupuestarias y Políticas estima que más de dieciséis millones de personas quedarían en la pobreza, o su nivel de pobreza se agudizaría, si las provisiones no se hacen de forma permanente.
Fuente: Democracy Now!